viernes, 29 de julio de 2011

LA COXION ESCANDINAVA


Anna López Ortega





El ultraderechista noruego Anders Behring Breivik ha puesto de manifiesto que la Nueva Extrema Derecha está muy presente en Europa. Detrás de los discursos populistas y xenófobos de estos partidos se encierra un fanatismo que puede llevar a sus seguidores a cometer terribles matanzas como la ocurrida en Oslo. Actualmente 19 países de los 27 de la UE tienen en sus parlamentos formaciones que defienden estos argumentos y en la propia cámara europea ocupan 35 escaños procedentes de 12 países; partidos que comparten, de una manera u otra el Manifiesto de 1.518 páginas de Behring. Éste menciona en 120 ocasiones a España, su «glorífica Reconquista» y la figura del Cid. Repasa el escenario político de la ultraderecha nacional, destacando el caso valenciano y en particular a España 2000 como «la tormenta que ha sacudido Valencia por sorpresa»·
En la Comunitat Valenciana, el discurso islamófobo, anticatalanista, antieuropeo y ultranacionalista se renueva a mediados de los noventa a través de Ernesto Milà, ideólogo de España 2000 y cabeza de la lista por Alicante en las pasadas elecciones autonómicas. 
Precisamente, Milà realizó una interpretación similar de la extrema derecha española tras el 22-M y a los pocos días publicó el primero de los «manuales de adoctrinamiento» en los que la temática y argumentación son semejantes a las del noruego. Comenzó con una advertencia sobre la amenaza y el atraso que supone el Islam para España, calificando esta religión de antidemocrática e intolerante. Ensalzó la Reconquista y la defensa de la identidad nacional, y en su última entrega anunció el peligro que supone la inmigración para el Estado de Bienestar. También ha vaticinado la crisis del sistema en 2014, momento en el que España 2000 consiga 60 concejales.
Para Behring Breivik, los musulmanes «son incapaces de vivir en paz con sus vecinos» y «están conquistando el continente», además «el multiculturalismo supone la destrucción de la identidad nacional». Como Milà, es apocalíptico y pretende reemplazar las democracias occidentales por monarquías o repúblicas de carácter administrativo. En Noruega, Breivik, militó durante 10 años en el Partido del Progreso, formación xenófoba y ultranacionalista que en las pasadas elecciones obtuvo el respaldo del 23% de la población. Milà perteneció a la organización neonazi PENS, al Frente Nacional y ha sido investigado por el atentado contra la sinagoga parisina de la calle Copérnico en París.
Las opiniones de Anders no eran un secreto y de hecho, el Centro Noruego contra el Racismo había denunciado su discurso en Internet y un debate en el que el propio Behring defendía el concepto de «verdadero noruego». En la Comunitat Valenciana, España 2000 difunde estos mensajes a través de panfletos, manifestaciones y sobre todo, en la red, obteniendo, junto con otras formaciones ultras alrededor de 30.000 votos. En Cataluña, Josep Anglada asistió en Viena al Baile de las Corporaciones, la tradicional cita de la extrema derecha europea donde obtuvo el apoyo del FPÖ austríaco, y más tarde, de la Liga Norte italiano y el Frente Nacional Francés. 
La conexión escandinava existe, y la Nueva Extrema Derecha no es un fantasma en la Comunitat Valenciana, sino un grupo de partidos políticos que están en nuestros ayuntamientos. La noticia de la tragedia ha sido en Noruega, esperemos que la próxima no sea en Valencia. Depende de todos nosotros.
 

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