domingo, 27 de mayo de 2012

HABIA UNA VEZ

... Pero solo una vez... un tiempo en que los ciudadanos, digo bien,ciudadanos de a pie simplemente, que ante cualquier deterioro serio de tu vida siempre tenías algún sitio a donde recurrir, podías pedir cualquier cosa a un vecino, que digo a un vecino a un concejal, a un teniente de alcalde, a la alcaldesa mismo, todo el mundo estaba dispuesto a prestarte la ayuda que necesitaras, nadie consentia que ningun vecino pasara ningun tipo de necesidades, todo el mundo estaba dispuesto para que el otro resto de todo el mundo fuera feliz y pudiera ir a la mañana siguiente al trabajo porque allí el empresario le estaba esperando con alegría.
Eran tiempos de lisonjas, alagos y si mucho me apretéis de adulación........... Una vez un vecino se quedo en la calle porque la vivienda en que vivía era muy mayor y se le vino abajo, y raudo como una centella el concejal del distrito le ofreció una vivienda de protección oficial... Si, si, habían viviendas de protección oficial..........Que no, que lo digo de verdad, no, no eran los tiempos de Jaime I, ni de Agustina de Aragon.
                                                
Esa "cosa" que llaman  la constitucion asi lo dice, que todos tienen que tener vivienda digna , tanto lo dice que le dedica un articulo entero, por eso los españolitos viven felices y confiados seguros de que lo del recibo del agua debe de ser un error. Un 60% de mas, un error, decididamente se han equivocado, porque resulta que lo que menos importa del recibo es el agua que has gastado, o es que hemos empezado a pagar el agujero negro de Emarsa?
                                             
Habia una vez" que si alguien o alguno pasaba por un momento de agobio se iba decidido al banco y le decias al director sin ruborizarte NECESITO UN CREDITO BLANDO,  ¡¡que no es broma!! que habían créditos blandos ¿que no me creeis? pues me voy con el cuento a otra parte.        sisco    

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