Otra vez la salud ha vuelto a enfadarse conmigo y a dejarme en mal lugar, porque no es de recibo que cuando vas por la calle de improviso te coja un mareo muy fuerte, tanto que o te coges a una farola o te vas al suelo, sin importarte un comino el mancharte el pantalon o la ropa que lleves. Y ¿cual es el resultado del mareo?,, pues doce dias en el hospital. Ese ha sido el motivo de que este blog no se haya movido en todo ese tiempo.

Otra vez he podido ver ese mundo que ahi tenemos pero que no sentimos porque no nos da de lleno, nada mas nos recordamos que existe cuando alguien propio o uno mismo esta un poco manoseado y gastado por la cantidad de mañanas que has amanecido.

Quizas esta vez he estado mas pendiente de lo que me rodeaba que de mi mismo. He visto,muy de cerca porque era compañero de habitacion a un padre de 88 años dejar de pedalear-muy poco a poco- hasta que su corazon ha dicho basta, ha dejado el pedaleo y se ha caido porque ya no había impulso.

He visto a la mujer de ese hombre, con 90 años, subirse a la cama, ayudada por sus dos hijos y buscar la boca de su marido para darle el ultimo beso de los miles y miles de ellos que se habrán dado en su vida.

He visto a muchas muchas personas, celadores, camilleros,enfermeras cuidar con cariño a pacientes que no siempre corresponden, ni  siquiera al respeto que merecen por ser personas.

En fin, que mientras el cuerpo aguante..........pues eso, que aqui esoy    sisco